94% de las Alertas de Seguridad recibidas por el SERNAC corresponden a vehículos
El año pasado, el SERNAC recibió más de 100 alertas de empresas que reportaron problemas de seguridad en sus productos, principalmente en los vehículos.
Las empresas tienen la obligación de informar al organismo en caso de que detecten algún riesgo una vez que han comercializado sus productos, y hacer retiro de ellos si es necesario.
18 de febrero de 2020
El año 2019 el SERNAC recibió un total de 114 alertas de seguridad por parte de empresas que reportaron eventuales riesgos en sus productos una vez puestos en el mercado, lo que representó un 5% menos en relación al 2018.
De ellas, el 94 % se concentran en vehículos (incluyendo autos, camionetas, motocicletas y camiones).
Categoría | % | Número de alertas |
---|---|---|
Vehículos (automóviles) | 81,6 | 93 |
Camionetas | 7,9 | 9 |
Motocicletas | 2,6 | 3 |
Camiones | 1,8 | 2 |
Computación | 0,9 | 1 |
Bicicletas | 0,9 | 1 |
Silla de bebé | 0,9 | 1 |
Flexible de gas | 0,9 | 1 |
Correas de entrenamiento | 0,9 | 1 |
Productos eléctricos y electrónicos | 0,9 | 1 |
Aseo personal y hogar | 0,9 | 1 |
Total | 100 | 114 |
Los defectos más reiterativos en vehículos ocurrieron en el sector de motor (27,2%); seguidos de airbags (16,7%); luego carrocería (8,8 %); calidad de algunas piezas (5,3 %); luces (4,39 %) y suspensión (3,5%), siendo los defectos más riesgosos los problemas relacionados con los airbags, sistemas de frenos o cinturones de seguridad.
Las marcas de vehículos con mayor cantidad de notificaciones fueron Audi (14 alertas): Ford (13); Volkswagen (13); Dodge (8); BMW (7); y Mazda (7).
En otro tipo de productos, destacó la alerta preventiva de seguridad de Kimberly - Clark Chile S.A. para un lote de sus toallitas húmedas Huggies comercializadas durante agosto del 2019, debido a que se encontrarían fuera algunas especificaciones microbiológicas para este tipo de productos y que podrían derivar en irritaciones u otras afecciones para el uso en personas con un sistema inmune deprimido.
Otro caso relevante fue el de la marca Fisher Price quien emitió un recall internacional (llamado a retiro de producto) por el riesgo de accidente en una silla de bebé por el mal uso del producto que causó varios accidentes en Estados Unidos. En este caso la medida consistió en el reembolso del dinero del valor total del producto o sustitución por un kit de productos.
Recordemos que cuando una empresa detecta algún problema o eventuales peligros después de haber puesto sus productos en el mercado, tiene la obligación de informar inmediatamente a las autoridades competentes; advertir a los consumidores y si corresponde, tomar todas las medidas para su retiro del mercado.
Por tanto, el que realicen notificaciones o procesos de recall, no implica que sean productos más defectuosos necesariamente, sino que cumplen con su responsabilidad como empresa al notificar y tomar las medidas para disminuir los riesgos para los consumidores.
Es importante que los consumidores acudan a sus llamados frente a un recall por sus productos y recuerden que:
Las campañas de recall NO se extinguen hasta cubrir el 100% de los productos alertados, incluso si:
- El vehículo (u otro producto) está fuera del plazo de garantía legal, garantía de fábrica, mantenciones periódicas de la marca;
- Ha realizado reparaciones o mantenciones en talleres mecánicos independientes (fuera de la marca);
- Usted ha comprado el vehículo de segunda o tercera mano.
Es decir, el derecho a realizar la campaña de seguridad sigue vigente, aún en los casos mencionados, tanto para vehículos como para otros productos.
En todos los casos, las empresas debieron ofrecer al consumidor alternativas para solucionar el problema, ya sea, cambio, reparación o devolución del producto, dependiendo del tipo de riesgo alertado y de las soluciones técnicas posibles y validadas por las autoridades sectoriales en caso necesario.
Estos procesos deben ser realizados con las mayores facilidades para el consumidor y sin ningún tipo de costo asociado.
El Director (s) del SERNAC, Jean Pierre Couchot, señaló que las alertas de seguridad son importantes pues su objetivo es prevenir que los consumidores puedan sufrir algún riesgo ya sea por defectos de un producto o por problemas de uso. "Las empresas cada vez más han entendido que es su responsabilidad alertar en caso de cualquier riesgo para los consumidores, sin esperar a que ocurran accidentes o cualquier daño, así como deben revisar sus procesos para que los productos que desarrollan cuenten con todos los protocolos de seguridad".