Guía para celebrar fin de año
Las celebraciones de fin de año son sinónimo de alegría, regalos, fiesta y comida. Al celebrar recuerde estos consejos. Revise eventos autorizados.
27 de diciembre de 2010
Las celebraciones de fin de año son sinónimo de alegría, regalos, fiesta y comida. Al celebrar recuerde estos consejos. Revise eventos autorizados.
Si va a un restaurante
- Tiene derecho a recibir información clara sobre las ofertas, los precios, el servicio que va a recibir y las modalidades de pago.
- Recibir un servicio de calidad y seguro. Las empresas faltan a su profesionalidad cuando venden alimentos en mal estado o con cuerpos extraños, que provocan daño a los consumidores.
- Es su derecho exigir condiciones adecuadas de higiene, seguridad y manipulación de alimentos en los restaurantes. Cualquier irregularidad en este sentido debe ser denunciada a la Autoridad Sanitaria correspondiente a su ciudad.
- Si tiene descuentos asociados a pagos con tarjetas de crédito pregunte, antes de ir o reservar, cómo funciona la oferta y las restricciones de la misma.
- No son válidas aquellas cláusulas del tipo "nos reservamos el derecho de admisión" pues pueden dejar abierta la posibilidad de discriminaciones.
- Recuerde que la propina es voluntaria, no es obligación que usted deje el 10% de su consumo., no es obligación que usted deje el 10% de su consumo.
En los espectáculos - conciertos - fiestas masivas
- Cuando compra las entradas, tiene derecho a que se le informe el precio final con todos los costos asociados (cargos por servicio, IVA)
- Que se cumplan las condiciones de la venta, por ejemplo, que las entradas se entreguen en el plazo comprometido.
- Que se informe sobre las condiciones relevantes del servicio, por ejemplo, si la ubicación tiene vista parcial.
- Si la entrada se adquirió a través de un servicio de acercamiento para la venta de boletos (como por ejemplo Ticketmaster o Feria ticket) ello debe ser informado al consumidor quien además debe tener la opción de comprar la entrada directamente en el lugar del evento sin el recargo por este servicio.
- Cuando asiste, tiene derecho a que el espectáculo se realice en condiciones de seguridad.
- Las empresas que organizan espectáculos son profesionales, por lo que deben responder por la seguridad del evento, el acceso y la salida. De modo que si un consumidor sufre daños por incumplimiento de esta profesionalidad, la empresa asuma los costos.
- Derecho a que el espectáculo cumpla con las características y condiciones que fueron publicitadas u ofrecidas. Esto significa por ejemplo, que si usted pagó por determinada ubicación o por ver a cierto grupo, debe ser eso lo que reciba.
Si se suspende el espectáculo
- Los consumidores tienen derecho a que se devuelva todo lo pagado, incluyendo el cargo por "servicio de acercamiento" como lo han ratificado los mismos tribunales.
- Derecho a ser indemnizado por todos los perjuicios que la suspensión o cualquier incumplimiento haya causado.
- El consumidor debe exigir la devolución del dinero de la entrada en el mismo lugar y en iguales condiciones de dónde y cómo la compró, sin más trámites que los similares por los cuales obtuvo el ticket.
Fuegos Artificiales
- Por muy lindo e inofensivos que parezcan, los petardos, las chispitas y los fuegos artificiales en general, han causado muchos accidentes por quemaduras, en especial en niños pequeños. Esto, a pesar de estar prohibida la venta al público de estos productos.
- Lo que sí está permitido son los eventos pirotécnicos con las respectivas autorizaciones donde los fuegos son manejados por especialistas.
- Obedezca las instrucciones de los organizadores de estos espectáculos, y respete las barreras de seguridad.
- No se acerque al lugar donde están lanzando fuegos. Los expertos indican que donde mejor se aprecian es desde aproximadamente 400 metros de distancia (3 o 4 cuadras)
- Si un componente del fuego artificial cae sin explosionar ceca de usted, llame de inmediato al personal del evento, bomberos o carabineros. Nunca lo manipule.
- Cuide a los menores que le acompañan. No permita que corran riesgos innecesarios.