Uso de la Mochila
La mochila ideal es aquélla que descansa y se adapta a la curva que forman las vértebras dorsales, cuidando que su parte baja quede cinco centímetros por sobre la cintura.
17 de marzo de 2004
La mochila ideal es aquélla que descansa y se adapta a la curva que forman las vértebras dorsales, cuidando que su parte baja quede cinco centímetros por sobre la cintura.
El tamaño de la mochila se tiene que adecuar a la edad y talla del niño, ya que una mochila excesivamente grande puede conducir a que la carga del peso involucre a la zona lumbar, mucho más sensible que la dorsal.
PARA UN USO ADECUADO, TENGA PRESENTE
. Repartir la carga al interior de la mochila, y colocar lo más pesado y voluminoso cerca de la columna, aligerando el peso hacia afuera.
·Orientar a los niños en la técnica adecuada para levantar la mochila cuando está muy cargada, la que consiste en doblar las rodillas y hacer la fuerza con las piernas.
·Llevar diariamente la carga estrictamente indispensable. El efectivo uso de lockers o casilleros individuales, de los que eventualmente disponga el colegio para el uso de sus alumnos, facilitará el cumplimiento de esta meta, y evitará el transporte innecesario de textos y cuadernos.
·Usar siempre la mochila con ambos tirantes, afirmada en los dos hombros, sin cargarla en exceso.
·Preferir los modelos que se cargan a la espalda, por sobre los modelos de carro.
·Preocuparse de elegir un diseño adecuado, con una capacidad ajustada a las necesidades diarias de carga. La compra de mochilas que excedan en mucho la capacidad justa y necesaria para el usuario, potencia una sobrecarga que no es deseable.